El miércoles pasado hubo una tormenta eléctrica intensa y el viernes los vientos fuertes tuvieron un gran impacto en uno de los grandes árboles en la zona de Oití.
Como resultado, una de las ramas principales se fracturó y cayó sobre el techo de uno de los salones de la escuela Alfonso López, que es parte de la institución educativa Jorge Eliecer Gaitán.
La comunidad educativa y las autoridades locales están preocupadas por este incidente y están evaluando los daños para tomar medidas preventivas y evitar futuros accidentes.
Mientras tanto, los 30 niños y su profesor de ese grado están apretados en la sala de profesores mientras se soluciona el problema.
Están esperando a que se reparen los daños para poder continuar con las clases.