By Una residente del Barrio María Eugenia Alto, ubicado específicamente en la carrera 30 con calle segunda, ha denunciado la situación de inseguridad que está viviendo en su hogar debido a las viviendas abandonadas en la zona, las cuales se han convertido en refugio para habitantes de calle y delincuentes.
Esta situación es aún más grave en su caso, ya que en su hogar vive un adulto de 96 años que necesita paz y tranquilidad.
Se hace un llamado a los propietarios de estas propiedades, que han sido dejadas al abandono durante varios años, para que tomen medidas efectivas y a las autoridades para que intervengan ante esta preocupante situación.
