Alexa Pérez, madre soltera de Venezuela, lleva más de dos semanas caminando con su hija de siete meses en brazos, cruzando la frontera hacia Colombia en busca de un futuro más digno. Su meta: llegar a Cali, donde su hermana la espera para brindarle apoyo y cuidar a su pequeña mientras empieza a trabajar.
Durante el trayecto, enfrentó múltiples retos: un grupo le robó el celular, dejándola incomunicada; tuvo que soportar el calor extremo, carencia de alimentos y agua, y el agotamiento físico producto del largo recorrido. Sin embargo, su motivación por ofrecer estabilidad a su bebé sigue siendo su fuerza más grande.